Una pequeña pista… ¡es la causante del 80% de los incendios que se producen en cocinas! En efecto, estamos hablando de la grasa. Las grasas acumuladas se convierten al estado líquido y consiguen filtrarse y alcanzar las uniones de los conductos, tanto dentro como fuera de la propia instalación extractora.
¿Sabías que en Europa y en la comunidad autónoma de Madrid la legislación le obliga realizar una limpieza de extracción de humos cada seis meses?
Sin embargo, en el resto de España no existe ninguna normativa que obligue realizar dichas limpiezas, aunque en Vilo Mediterráneo siempre recomendamos a nuestros clientes realizar una limpieza de forma anual, lo que evitará peligros innecesarios.
Las razones que hay detrás de estas limpiezas son muchas y variadas:
1. La generación de grasa supone un riesgo de incendio en la cocina. Dependiendo de un menor o mayor funcionamiento de una cocina, ésta acumulará grasa de manera exponencial y necesitará una mayor frecuencia de limpieza y desengrase.
2. La acumulación gradual de la grasa y carbonilla genera un residual (combustible) idóneo para que resulte en un incendio, que se podría haber evitado efectuando un preventivo mantenimiento y limpieza periódica.
3. Por otro lado, el conjunto de suciedad acumulada hace que el extractor trabaje forzado consumiendo mucha más energía de la necesaria, con la consecuencia de acortar la vida del mismo. Además, genera malos olores por una ventilación inadecuada, aumentando el riesgo de contaminación.
Y ahora, ¿podrías afirmar que tu cocina es un lugar seguro?
Esperamos que está información te haya podido ser de utilidad,
¡Hasta pronto!
